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2/3/22

ESTILOS PARENTALES.

¡HOLA EDUSOS! 

    ¡Ya estoy de vuelta otra semana más!

    Está semana vengo a hablaros de los tipos de estilos parentales que pueden darse en la unidad familiar y de la importancia de un buen estilo parental para nuestros adolescentes. Veo necesario dedicarle una publicación al tema, ya que en entradas anteriores os he mencionados algunos de los tipos sin poder explayarme sobre ello.

COMENCEMOS...
Familia. Fuente: Pixabay

    La familia cumple una función decisiva en el desarrollo de los niños/as, tanto que se puede afirmar que es el contexto de desarrollo por excelencia, durante los primeros años  de vida de los seres humanos. La unidad familiar es quien puede promover el desarrollo personal, social e intelectual y, además, quien habitualmente puede protegerlo de diversas situaciones de riesgo.

    Diana Baumrind (1967, 1971), es una de las investigadoras más conocidas sobre los estilos de interacción dentro de las unidades familiares. Esta autora denominó dichas interacciones como "estilos parentelas". Es decir, forma en que padres y madres ejercen el proceso de establecimiento de norma y el manejo de la autoridad en sus hijos/as.

    A partir de los datos obtenidos por el estudio, Baumrind propuso cuatro estilos parentales: autoritario, equilibrado (o democrático), permisivo y no implicado.

  • Estilo parental autoritario: los adultos siguen un patrón muy restrictivo, en el cual imponen muchas reglas, esperan una obediencia estricta, y rara vez o nunca explican al niño/a por qué es necesario obedecer todas estas reglas. Implican modos estrictos de castigos, como la afirmación de poder o retirada del amor, para conseguir la obediencia, imponiendo al menor un papel subordinado y restringiendo su autonomía. No facilitan el diálogo, e incluso llegan a utilizar el rechazo como medida disciplinaria.
  • Estilo parental democrático: destaca por un patrón de crianza que utiliza el razonamiento y la negociación. Los adultos realizan las demandas necesarias para justificar las normas, con la finalidad de que los menores acepten los límites que se establecen. Cuentan con la participación de sus hijos/as en la toma de decisiones. Por tanto, son padres y madres considerados con autoridad (no autoritarios) y ejercen un control racional y democrático (no dominante). Cada miembro de la familia tiene derechos y responsabilidades con respecto a los demás, caracterizada por una comunicación bidireccional.
  • Estilo parental permisivo: siguen un patrón parental aceptador y relajado hacia los impulsos y acciones de los hijos/as. Inexistencia de control, evitando la autoridad, las restricciones y el castigo hacia sus hijos/as, dotándoles de gran autonomía. En la mayoría, los adultos no son capaces de imponer límites ni normas en la unidad familiar.
  • Estilo parental no implicado: los adultos se muestran indiferentes a las necesidades de sus hijos/as, no existe ninguna implicación emocional. Son pasivos y no existen normas ni límites en la unidad familiar. No utilizan castigos, y mucho menos refuerzos hacia las conductas de los menores.

    A continuación, les muestro algunas de las consecuencias que se pueden presenciar en los menores dependiendo del estilo parental:

  • AUTORITARIO. Obedientes, hasta el punto de ser anulados, pérdida de propia personalidad, sentimiento de culpa, baja autoestima, escaso control, poca confianza en sí mismo, problemas depresivos, a veces hostiles y rebeldes, etc.
  • DEMOCRÁTICO. Más felices, generosos con los demás, mayor competencia social, mayor autoestima, mayor responsabilidad, persistente en sus tareas,  confianza en ellos mismos, buena actitud y rendimiento escolar, buena salud mental, escasos problemas de conducta, etc.
  • PERMISIVO. Inmaduros, incapacidad de control de impulsos, poco persistentes en sus tareas, peor rendimiento escolar, confianza en sí mismo, problemas de conductas y abuso en el consumo de drogas, etc.
  • NO IMPLICADO. Baja autoestima, no acatan normas, no existe empatía respecto a las emociones de los demás, vulnerables a conflictos personales y sociales, problemas escolares, muchos problemas de conducta y abuso en el consumo de drogas, etc.
Unidad familiar. Fuente: Pixabay
    Como reflexión, me gustaría destacar el gran papel que tienen los padres/madres/tutores legales sobre los menores. Ya que depende de ellos un gran porcentaje de que el menor pueda adoptar unas conductas sanas y equilibradas o unas conductas disruptivas. Por último, destacar que dentro de la unidad familiar nunca existe un estilo parental permanente, sino que existe una combinación entre ellos. Lo importante debe ser que el estilo parental dominante sea el democrático.

Espero que os haya gustado, y no olvidéis: 
EL VALOR DE LOS VALORES.
Un saludo.

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